¡No es una maldición, es una bendición!

ABSTRACT

¿Alguna vez te has encariñado mucho con un personaje ficticio?, ¿Incluso seguir la lectura solo por ese personaje favorito? Amar tanto a ese personaje favorito pero que de pronto, el autor decide matarlo. Es tan frustrante y doloroso que no puedes evitar llorar y maldecir. Este es el caso de Alisha, una adolescente de diecisiete años que se encariñó con el segundo protagonista masculino, la segunda opción amorosa de la protagonista pero que no fue elegido y debido al corazón roto, bebió tanto alcohol que terminó muriendo de intoxicación. Alisha tiró el libro contra la pared y rompió a llorar por varias horas mientras maldecía hasta quedarse dormida, cuando abrió los ojos descubrió que se había convertido en un pequeño y sucio gato. Después de vagar tres días y tres noches, se encontró con su personaje favorito alimentando gatos callejeros. Alisha cree que su maldición no es en realidad una, ¡Es una bendición! Se aferró a su personaje favorito mientras maullaba con una dulce vocecita. ¡Meow, meow, llévame a casa y sé mi maestro!